Nos gusta el otoño

La mejor manera de llevar una dieta sana y equilibrada es prescindir de los alimentos elaborados y optar por productos frescos de temporada. Os dejamos algunas sugerencias para el producto estrella de otoño. Esperamos que os gusten:

Crema de calabaza y manzana:

Ingredientes:

2 manzanas verdes
1 kg de calabaza
2 cucharadas de aceite de oliva
1 cebolla dulce
750 ml de caldo de pollo casero
Sal
Taquitos de jamón serrano

Elaboración: 

Troceamos la calabaza y las manzanas y las ponemos en una fuente de cristal apta para horno. Dejaremos que se hagan durante 15 minutos a 180º. Mientras, rehogamos la cebolla en una olla, agregamos el caldo (puede ser de pollo o de verduras, el que tengáis hecho) y le añadimos la calabaza y la manzana que habíamos horneado. La sal podéis agregarla ahora, o prescindir de ella si van a tomarla los niños nada más. Dejamos que hierva unos 10 minutos.

Retiramos del fuego y trituramos hasta conseguir la textura deseada. Servimos decorando con taquitos de jamón.

Risotto de calabaza y parmesano:

Ingredientes:

150 gr de arroz arborio
200 gr de calabaza
1 cebolla
½ litro de caldo de pollo
1 vaso de vino blanco
1 cucharadita de mantequilla
50 gr de queso parmesano rallado
Sal
Pimienta

Elaboración:

Pelamos la calabaza y la cortamos en dados dejándola reservada en un recipiente.
Ponemos a calentar una olla con una cucharada de mantequilla. Dejamos que se derrita, picamos la cebolla muy fina y la pochamos con la mantequilla a fuego medio.
Cuando veamos que la cebolla está pochada, le añadimos la calabaza y el arroz. Salpimentamos al gusto y le añadimos el vaso de vino blanco.
Dejamos que el vino reduzca unos minutos sin dejar de remover.
Poco a poco vamos añadiendo el caldo de pollo, que debe estar caliente, para que el arroz quede meloso, y vamos removiendo continuamente el arroz para que suelte todo el almidón, que es lo que hará que el arroz esté en su punto y se vaya formando la crema que es tan típica del risotto.
Una vez que tengamos la textura que queremos de nuestro risotto, lo retiramos del fuego y le añadimos el queso parmesano rallado que se deshará con el calor residual de nuestra cocina. Podéis decorar con hojas de perejil o albahaca, incluso podéis añadir pipas de calabaza.