Nos estuvimos preparando y empezamos a hablar de las emociones el lunes. Leímos el monstruo de los colores en clase y hablamos en la asamblea de cómo nos sentíamos.
El martes a las 10:30 llegó nuestro autobús. Nos subimos y nos pusimos el cinturón. El viaje es pura emoción.
Al llegar, hicimos bien la fila con nuestra seño para poder llegar a la puerta del teatro.
Son muchos los que aún no habían ido al teatro, la sala nos esperaba para que nos sentáramos y empezara el espectáculo.
Pudisteis ver un fragmento de la obra en los stories de instagram, pero la cámara no la sacamos para respetar la oscuridad de la sala. Hubo palmas, aplausos, algún llanto y muchas risas.
Y de nuevo en fila, hasta el autobús, nos volvemos encantados de la mañana que hemos pasado.
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